El desafío de producir un alto torque surge a menudo en el diseño de la industria de manejo de materiales.
Una de las mejores
soluciones a este problema es el uso de un reductor en combinación con un motor
estándar.
Un reductor de engranajes puede multiplicar torque impulsado por 100
veces o más, dependiendo de la selección del diseño. Si se selecciona
adecuadamente la combinación de un reductor de engranajes y el motor puede resultar
en un paquete de accionamiento de alto par de torsión a un bajo costo.
En términos más simples, un reductor sirve para tres
propósitos principales: Se reduce la velocidad, se aumenta el par y también se
puede cambiar el eje de rotación. Algunas aplicaciones tienen limitaciones de
espacio que requieren un cambio de 90º en el eje de accionamiento. Los reductores
de ángulo recto son una solución cuando el espacio es reducido.
Un paquete bien diseñado es aquel que maximiza el
rendimiento general de la aplicación. El reductor debe tener el tamaño correcto
y la velocidad de salida adecuada para permitir que el motor funcione en su
intervalo de velocidad y prestación más eficiente. Un reductor facilita que el
motor entregue su velocidad y potencia nominal; a su vez entregue el torque necesario
para el eje accionado.
En bajas velocidades y alto par la solución es un reductor.
Dentro de las industrias que utilizan aplicaciones con reductores podemos encontrar
de Agregados, Minera y Cementera, la razón de esto, es que estas aplicaciones
requieren frecuentemente alto par de funcionamiento a velocidades relativamente
bajas. Cuando usted esté involucrado en el diseño de una solución de
accionamiento mecánico para aplicaciones de baja velocidad y alto par, tenga en
cuenta todas las ventajas que un reductor puede proporcionar.
Fuente: ABB Colombia